Feliz Holi 2024
Una nube caleidoscópica de colores se cierne hoy sobre la India, donde Holi marca el comienzo de la primavera después de un largo invierno, y simboliza el triunfo del bien sobre el mal.
A pesar de tener raíces en el hinduismo, lo celebran todas las comunidades religiosas indias y no es raro ver a hindúes y musulmanes abrir sus hogares unos a otros para esta festividad.
Hoy, los polvos de colores harán que todos se igualen, que desaparezcan las fronteras entre castas y clases y que los extranjeros se unan a los locales. Algunos lanzarán globos llenos de agua coloreada desde los tejados y otros utilizarán pistolas de agua, mientras se escucharán gritos de “¡Holi hai!” que significa «¡Es Holi!».
Así ha sido durante cientos de años en la India. Este festival aparece documentado en poemas que se remontan al siglo IV d.C.
Hay diversos relatos sobre el origen de Holi mencionados en varias obras de la literatura india antigua. Según una versión popular de la historia, un rey malvado se volvió tan poderoso que obligó a sus súbditos a adorarlo como a su dios. Sin embargo, su hijo Prahlada continuó siendo un ferviente devoto de la deidad hindú Vishnu. El rey se enfadó y conspiró con su hermana, Holika, para matar a su hijo. Holika, que era inmune al fuego, engañó a Prahlada para que se sentara con ella en una pira. Cuando se encendió la pira, la devoción del niño por Vishnu lo ayudó a salir ileso, mientras que Holika, de quien deriva el nombre del festival, murió quemada a pesar de su inmunidad.
En otros lugares, se cuenta que Krishna, una deidad hindú que es considerada una manifestación de Vishnu, se enamoró de la lechera Radha, pero a él le avergonzaba que su piel fuera azul oscuro y la de ella clara. Para disimularo, le coloreó la cara en broma durante un juego con ella y las otras lecheras. Se cree que este es el origen del lanzamiento de agua coloreada y polvo. La alegría general también se considera característica de Krishna, conocido por sus bromas y juegos.
¿Cómo se celebra Holi?
En vísperas del festival, en muchas partes de la India se encienden grandes piras para indicar la quema de espíritus malignos. La gente suele arrojar madera, hojas secas y ramitas a las hogueras.
En el día de Holi, la gente teñirá calles y pueblos de rojo, verde y amarillo lanzándose polvos de colores unos a otros. Cada color tiene un significado. El rojo, por ejemplo, simboliza el amor y la fertilidad, mientras que el verde representa nuevos comienzos. El azul representa el color de la piel del dios Krishna, mientras que el verde simboliza la primavera y el renacimiento.
Además, las familias se reúnen para disfrutar juntas de comidas especiales (como la «gujia», un pastel dulce hojaldrado y frito relleno de cuajada de leche, nueces y frutas secas o el “thandai”, una bebida fría preparada con una mezcla de almendras, semillas de hinojo, pétalos de rosa, semillas de amapola, azafrán, leche y azúcar) y es habitual repartir dulces entre vecinos y amigos.
Holi se ha vuelto cada vez más popular fuera de la India, en gran parte debido a los millones de indios que viven en todo el mundo. Algo similar pasa con el Diwali.
Sin embargo, no faltan, cada año, críticas a su mercantilización y apropiación cultural, especialmente en Estados Unidos y Europa, donde prima la naturaleza efectista de algunos eventos sobre el significado religioso del festival, convirtiéndolo en una fiesta estridente o “maratones de colores”.
Otros, en cambio, afirman que estas celebraciones son fundamentales para unir a personas de diferentes culturas.
¡Feliz Holi! Deja que los colores brillen en tu alma.